El jurado ha declarado a Donald Trump culpable de todos los cargos en el ‘caso Stormy Daniels’, marcando un hito en la historia política y judicial de Estados Unidos.
Este veredicto unánime del primer juicio penal a un expresidente, adoptado por los 12 miembros del jurado, implica que Trump falsificó registros contables para encubrir el pago de un soborno a la actriz porno Stormy Daniels con fines electorales. A pesar de esta condena, Trump sigue siendo elegible para presentarse a las elecciones presidenciales de noviembre, y podría incluso ser reelegido.
La sentencia llega en un momento crucial, a poco más de cinco meses de las elecciones presidenciales, creando una conmoción en el panorama político estadounidense. Aunque algunos de los seguidores de Trump han declarado que seguirán apoyándole a pesar de la condena, la situación es sin precedentes y la reacción del electorado sigue siendo imprevisible. Trump se convierte así en el primer expresidente de Estados Unidos condenado en un juicio penal.
Tras el veredicto de culpabilidad, el siguiente paso es la imposición de la sentencia por parte del juez, prevista para el 11 de julio.
Durante el juicio, Trump se mostró sorprendido y sin palabras tras escuchar el veredicto, pero luego, en una breve comparecencia ante los medios, adoptó una postura combativa y desafiante, calificando el proceso como una “vergüenza” y acusando al juez de ser “corrupto”. Trump insistió en su inocencia y llamó a sus seguidores a emitir el “verdadero veredicto” en las elecciones de noviembre.
En sus declaraciones, Trump aseguró estar luchando por el país y la Constitución, y acusó a la administración Biden de manipular el juicio para dañar a un oponente político. Sus comentarios incluyeron retórica xenófoba y afirmaciones sobre una crisis migratoria, enfatizando su intención de seguir luchando hasta llegar al Tribunal Supremo si fuera necesario.
Por Luis Martínez Alcántara.
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